La primera es que el chakra del corazón y el del cuarto ojo se unen y proyectan sobre lo que queremos aprender dos haces energéticos que descomponen todo lo que queremos aprender en una trama: el cuarto ojo representa todo en líneas horizontales y el chakra del corazón, en líneas verticales. Y la segunda es que este fenómeno -fácilmente alterable por los problemas afectivos o de concentración- representa el 60% de la bioenergía del aprendizaje, mientras que el 35% proviene de una compresión de energía de la kundalini que se produce en el hueso coccígeo y que le permite brotar como un proyectil y llegar a la glándula pineal. La familia de estos origamis bioenergéticos, permiten reeducar chakras y kundalini en estas dos funciones para lograr un mejor desarrollo de nuestras capacidades y aprendizaje. Los Diseños delanteros influyen en los chakras. Los diseños traseros influyen sobre la kundalini. Para Saber Mas CLICK AQUI